PIEDRALUNA
Lleva Piedra luna cuando necesites sentirte equilibrado o están cambiando aspectos de tu vida. Trae calma a través de la conciencia.
Proporciona la energía suficiente para el sostenimiento a través de etapas de crecimiento.
Una piedra muy intuitiva que permite la libre expresión y que la creatividad fluya. Portadora de buena suerte.
Se utiliza para promover la facilidad de embarazo y el parto, para aumentar la fertilidad, aliviar el síndrome premenstrual, para eliminar el insomnio y los trastornos circulatorios.
Piedra Luna elimina lo que no es necesario, sólo da la verdad. Es la llave de la puerta de los Reinos sutiles. Da la pureza y divinidad, mejora nuestra capacidad de dar y recibir, y ennoblece nuestra vida emocional.
Abre el corazón y permite que la energía fluya para sanar los chakras inferiores.
Piedra de la feminidad y de la Diosa. También se la llama “de los nuevos comienzos”. Está fuertemente conectada con la Luna, y con la intuición. Es una piedra reflexiva que nos recuerda que Todo forma parte de un ciclo de cambios.
Mentalmente calma las reacciones excesivas ante situaciones y detonadores emocionales. Su energía receptiva, pasiva y femenina, equilibra la dualidad femenina-masculina, y ayuda sobre todo a los hombres a ponerse en contacto con su lado femenino.
El antídoto perfecto para los hombres excesivamente “machos”, y para las mujeres con tendencias a la agresividad. Es apreciada por su capacidad para resolver problemas entre amantes, especialmente entre aquellos que se han peleado amargamente.
La Piedra de luna abre la mente también a impulsos repentinos e irracionales, a la “causalidad significativa” y a la sincronicidad. Hay que tener cuidado de que no introduzca ilusiones de respuesta a nuestros pensamientos teñidos de deseos.
Su efecto más poderoso es el de calmar y estabilizar las emociones. Hace consciente lo inconsciente, activa la intuición y la empatía, y fomenta los sueños lúcidos durante la luna llena.
Alivia la inestabilidad emocional y el estrés, mejora la inteligencia emocional. Proporciona una profunda curación emocional y cura los desórdenes provocados por el estrés.
Es muy recomendable para las personas con capacidades psíquicas extrasensoriales, y también para trabajar con ella a la hora de usar el tarot, la bola de cristal, el péndulo…
Curación
Favorece el funcionamiento del tracto digestivo, alivia el síndrome premenstrual, y excelente durante el embarazo en todos los estadíos, incluso el parto y la lactancia. Su elixir se ha usado siempre para el insomnio y para evitar el sonambulismo.
Posición
Comúnmente se lleva en anillo, pero podemos situarla en cualquier parte del cuerpo. Sobre la frente podemos usarla para inducir experiencias espirituales, y sobre el plexo solar y el corazón para tratar las emociones. Es posible que las mujeres necesiten quitársela durante la fase de luna llena.
Muchos dicen que su poder mengua con la luna decreciente, y crece con la creciente, llegando a su apogeo durante la luna llena. Durante la luna decreciente es recomendable usarla para la adivinación.
Se usa comúnmente en el Altar para representar a la Diosa. Se usa para atraer el amor, si rodeamos una vela rosada de piedras de luna durante la luna llena y visualizamos una relación amorosa.
Debido a su relación con los sueños se recomienda colocarla bajo la almohada al dormir. Con la malaquita y el jade verde, suele usarse para fertilizar y proteger jardines y huertos.
A menudo se ritualiza como amuleto protector, especialmente para los viajeros. Los videntes las usan 3 días después de la luna llena, sosteniéndola en las manos o colocándola bajo la lengua, para visualizar posibles cursos de acción futuros, desechando los caminos poco recomendables y ayudándoles a visualizar el correcto.